El pasado jueves y viernes 23 y 24 de junio se llevaron a cabo las 1eras Jornadas Internacionales de Prevención de Secuelas de Terapia Intensiva: abordaje interdisciplinario. Las mismas se enmarcan dentro del Programa de extensión propuesto por la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UCCuyo y el Centro Interdisciplinario de Estudios Integrales. Dichas jornadas buscan realizar aportes a profesionales, estudiantes, ex-pacientes UTI y familiares, desde una mirada orientada a humanizar las prácticas clínicas y el acompañamiento. Participaron expositores de España, Chile y Argentina, cómo también asistentes de todo el país.
Los objetivos principales de la actividad incluyen profundizar en el estudio de la prevención de Secuelas de la Terapia Intensiva en pacientes, familiares y equipo de salud, caracterizar y describir el Trastorno de estrés post traumático –TEPT- y el Síndrome Post terapia intensiva PICS (Post intensive care síndrome) y favorecer el desarrollo de una conciencia responsable, cognitiva, psicosocial, sensibilizadora en relación al tratamiento de la persona humana: pacientes, familias y profesionales de la salud de las terapias intensivas.
Se ha estudiado que el conjunto de síntomas físicos, cognitivos y mentales provocados por el hecho de haber ingresado en una unidad de cuidados intensivos, conllevan un deterioro en la calidad de vida tras el alta, influyendo en el pronóstico a largo plazo del paciente (Lopez Ruiz et al 2020). En el siglo XXI aumentaron los estudios de seguimiento de UTIs, encontrándose. Hay numerosos antecedentes de seguimiento de pacientes egresados de UTI los cuales muestran que estos problemas suelen persistir durante un largo período de tiempo y afectan la calidad de vida relacionada con la salud, pero potencialmente pueden tratarse si se reconocen los síntomas. (Oeyen S.G., Vandijck D.M., Benoit D.D., Annemans L., Decruyenaere 2010; Cuthbertson B.H., Scott J., Strachan M., Kilonzo M., Vale L. 2005; Hopkins R.O. Weaver L.K., Collingridge, Parkinson R.B., Chan K.J., Orme J.F., 2005). Desde una perspectiva antropológica integral, se advierte que las experiencias de estas personas durante su internación conforman una problemática compleja e interdisciplinar. Del mismo modo, los familiares, cuidadores de estos pacientes con ingresos prolongados, se ven afectados sufriendo diferentes secuelas. Por otra parte, suman a las tensiones propias de las unidades de terapia intensiva, que en los centros de salud siempre son las más críticas, la sobre exigencia que la actual pandemia impone. Esta situación produce que también el personal que trabaja en dichas unidades haya incrementado los efectos de las enormes tensiones laborales que afrontan cotidianamente, con la prevalencia de variables relacionadas con el desgaste profesional y otras consecuencias.